lunes, 13 de junio de 2011

Lenguajeando el silencio *



Hay veces que dan ganas de decir, callando. Dar de lado a las palabras y que se abracen a solas. Permitir que reposen, hasta superar su bordura más sublime. Concederles un respiro de desobediencia y cura, después de zafarse del ponzoñoso yo que se impone al nosotros.

Hay veces que dan ganas, digo, de celebrar las palabras enmudeciendo. De alentar su fuga, lejos de la lógica que las ordena mientras las estrangula. Solo así, las palabras hablan la lengua de los pájaros que sin saber saber, siembran su luz, cesan el tiempo y nada entienden que no sea lo indecible.

La lengua de los pájaros se hospeda entre las ramas y sólo acontece sostenida en la transparencia del viento que sopla cuando quiere y donde quiere… y solo se escucha su destello de puro presente, dejándolas marchar...

¿No es acaso lo último que hacen los pájaros?



"Pájaros en el espacio"
Joan Miró

* "Cantando al revés los pájaros desencantan el canto hasta caer en el silencio (...) lenguajeando el silencio en el desmigajamiento de un canto ya sin canto"
Juan Luis Martínez

5 comentarios:

Miguel Ángel W. dijo...

Qué dominio de la imagen en el lenguaje... Celebro tus palabras, que de tan bellas, me hacen enmudecer. Gracias.

Turulato dijo...

Solo es posible conocer algo y sentirlo cuando se ausenta. Solo se asume el valor de algo cuando nos falta.

El vacío es pavoroso. Pero desde él nos enamora cualquier pequeño detalle que llena nuestra vida

Algaire dijo...

Si, hay veces que dan ganas de decir callando y otras veces callamos porque no sabemos que decir y eso me pasa a mi hoy, me dejaste sin palabras y mira que es difícil hacerme callar.
Un abrazo

Trini Reina dijo...

Callándolas o al viento lanzándolas: palabras, muchas palabras. Mecernos en palabras.

Besos

Turulato dijo...

Releo.. Callar.. Según vuelan los años, callar y mirar. Habla la vida, contemplas las piedras.. Susurra la brisa, arrullan las aguas.. Trinan los pájaros. Música de la entraña